Primero, debemos saber que la temperatura normal de un bebé oscila entre los 36ºC y 38ºC . Por fin, se entiende como fiebre al aumento de la temperatura por encima de 38ºC (axilar) y 38ºC (rectal) .
Antes que nada, debes asegurarte de que tu bebé realmente tiene fiebre. Colocar tu mano en la cabeza o frente no es la mejor forma de saberlo, pero si lo sientes más caliente de lo normal, busca un termómetro , preferiblemente de mercurio; el eléctrico también sirve. Debes saber que existen dos tipos de termómetros de mercurio: el rectal (la punta plateada es más pequeña) y el axilar (la punta plateada es más larga). ¡YA NO SE USA TERMÓMETRO ORAL! El bebé podría romperlo e ingerir el mercurio.
Recuerda que la fiebre es un síntoma que presenta el cuerpo para indicarte que estás frente a un proceso infeccioso. A su vez, debes recordar que el 80% de los casos, la fiebre es de origen VIRAL y no requiere antibiótico. Los antibióticos no quitan la fiebre; no caigamos en el uso irracional de estos.